Llévate a este niño y críamelo, y yo te daré tu salario. --- Id también vosotros a la viña, y lo que sea justo os daré. --- Porque cualquiera que os dé de beber un vaso de agua en mi nombre, porque sois de Cristo, de cierto os digo: no perderá su recompensa. --- El alma que bendice, será saciado, y al que da de beber le saciarán la sed. --- Porque Dios no es injusto para olvidarse de vuestra obra y del amor que habéis mostrado hacia su nombre, habiendo servido a los santos y sirviéndoles aún. --- Cada uno recibirá su propia recompensa conforme a su propia labor. --- Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de beber? ¿Y cuándo te vimos forastero, y te recibimos, o desnudo, y te vestimos? --- Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo, en cuanto lo hicisteis a uno de los más pequeños de estos mis hermanos, a mí lo hicisteis. --- Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo.
Éxodo 2,9 --- Mateo 20,4 --- Marcos 9,41 --- Proverbios 11,25 --- Hebreos 6,10 --- 1 Corintios 3,8 --- Mateo 25,37-38.40.34
Tú escudriñas mi andar y mi acostarme, y todos mis caminos te son conocidos. - Y despertó Jacob de su sueño, y dijo: Ciertamente Jehová está en este lugar, y yo no lo sabía! Y tuvo miedo, y dijo: ¡Cuán pavoroso es este lugar! Esto no es otra cosa la casa de Dios, y esta es la puerta del cielo. - Porque los ojos de Jehová recorren toda la tierra, para mostrarse poderoso a los que tienen corazón perfecto para con Él. - En paz me acostaré, y asimismo dormiré; porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado. - Porque has puesto a Jehová, que es mi refugio, al Altísimo por tu habitación, no te sucederá ningún mal, ni plaga se acercará a tu tienda. Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos. - Cuando te acuestes no tendrás temor, sí, te acostarás y será dulce tu sueño. - Así dará a su amado en el sueño.
Salmos 139,3 - Génesis 28,16-17 - 2 Crónicas 16,9 - Salmos 4,9 - Salmos 91,9-11 - Proverbios 3,24 - Salmos 127,2