Dios, el cual nos da abundantemente todas las cosas para (nuestro) disfrute. ---- Cuídate de no olvidarte de Jehová tu Dios, de modo que no guardes sus mandamientos y sus ordenanzas y sus estatutos, que yo te ordeno hoy. No sea que cuando comas y te sacies, y edifiques hermosas casas y las habites,... tu corazón se eleve y te olvides de Jehová tu Dios... Antes bien, te acordarás de Jehová tu Dios, porque es El que te da fuerza para hacer riqueza. --- Si Jehová no edifica la casa, en vano trabajan los edificadores en ella; si Jehová no guarda la ciudad, en vano vela la guardia. Es en vano es para vosotros que os levantéis de madrugada, que os acostéis tarde, que comáis el pan de fatigas; así dará a su amado en el sueño. --- Pues no por su espada tomaron posesión de la tierra, ni su brazo los salvó; sino tu diestra y tu brazo, y la luz de tu rostro, porque te complaciste en ellos. Muchos dicen: ¿Quién nos mostrará el bien? ¡Alza, Jehová, sobre nosotros la luz de tu rostro!

1 Timoteo 6,17 --- Deuteronomio 8,11-12.14.18 --- Salmos 127,1-2 --- Salmos 4,7

Y cantan un cántico nuevo. - ...Lugar Santísimo por la sangre de Jesús, por un camino nuevo y vivo que El inauguró para nosotros... - El nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino conforme a su misericordia, por medio del lavamiento de la regeneración y la renovación del Espíritu Santo, que Él derramó sobre nosotros abundantemente por medio de Jesucristo nuestro Salvador. - Porque por la gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe. - No a nosotros, oh Jehová, no a nosotros, sino a tu nombre da gloria. - Al que nos ama y nos ha lavado de nuestros pecados en su sangre, y ha hecho de nosotros un reino, sacerdotes a su Dios y Padre: A Él sea la gloria y el poder por los siglos de los siglos. Amén. - Tú eres digno de tomar el libro y de abrir sus sellos; porque tú has sido inmolado y has redemido para Dios, con tu sangre, de toda tribu y lengua y pueblo y nación. - Después de esto miré, y he aquí una gran multitud, la cual nadie podía contar,...Y claman a alta voz, y dicen: ¡La salvación a nuestro Dios que está sentado sobre el trono, y al Cordero!

Apocalipsis 14,3 - Hebreos 10,19-20 - Tito 3,5-6 - Efesios 2,8-9 - Salmos 115,1 - Apocalipsis 1,5-6 - Apocalipsis 5,9 --- Apocalipsis 7,9-10